Silencio

Dicen que el silencio es la ausencia del sonido. En este preciso instante pienso que tal vez sea la ausencia de tu cariño, de tu amor desmedido.

Olvido por completo que quien inicio este breve pero tormentoso exilio fui yo, por razones que solo yo entiendo y quedare sin comprender.

Silencio es lo único que tenemos, una ausencia aterrorizante de cualquier gesto, de cualquier palabra. La música que una vez sonaba para nosotros se ha ido y ahora solo ha sido reemplazada por llantos repentinos, memorias escondidas y recuerdos estropeados.

Hoy no quiero mas silencio,
pero he perdido el aliento,
esperando como el viento por el fin de este tormento.

Mi orgullo es tan parecido al tuyo, midiéndonos a ver quien resiste mas, sabiendo que perdemos los dos en medio de este embrujo.

Espero por ti y lo único que encuentro es desespero, pero guardo la esperanza en que algún día volverás santa alabanza, y tal vez queramos sonar como mi piano.

Estoy harto de probarte, de tener que acorralarte para ver si algún día ves la luz de mi estadía.

Solo quiero que comprendas,
que mas allá de toda ciencia,
de toda arte o mi paciencia,
que eres tu mi dependencia.

Y es que soy adicto a tu sonido,
a tu voz y a mi alivio,
de oírte y sentirme vivo.

Pero ahora solo hay silencio,
mas brutal que el desprecio,
y siento ahora el sacrificio,
de no sentirte hablándome despacio.

No se si te he dejado ir, en cualquier caso solo se feliz, recuerda mi voz y solo espera que en otro momento me haya cansado de este silencio…

Porque al parecer… era necesario.